
"Una escuela debe ser un lugar para todos los niños, no basado en la idea de que todos son iguales, sino que todos son diferentes"
Loris Malaguzzi
"LA ESCRITURA NOS UNE COMO CORAZONISTAS"
Docentes encargados: Víctor Hugo Mosquera Viveros - Wilmar Vásquez Salazar.
Categoría B
Primer puesto
VALERY Y SU MADRE
Oscar Andrés Mosquera Bernal

Había una vez una joven llamada Valery muy estudiosa la cual vivía con su madre que era ciega, ella estudiaba en la mañana y en la tarde trabajaba en una heladería y por la noche con el poco de tiempo que le quedaba hacia los trabajos del colegio.
Ella no era hija única pero si era la única que respondía por su madre, en esos tiempos había llegado una enfermedad la cual estaba matando a muchas personas y pues la madre de Valery le decía que tuviera cuidado que eso era muy grave y la podía matar fácilmente, ella mantenía diciendo que no se preocupara que esa enfermedad solo estaba atacando a los viejos.
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Días después Valery decidió ir a una fiesta porque estaba cansada de siempre estar con la misma rutina diaria, en esa fiesta bailaron y bebieron hasta el amanecer sin saber que en esa misma fiesta había alguien contagiado.
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Cuando llego a casa su madre estaba llorando en la cama, le dijo que porque la había dejado sola tanto tiempo ella muy apenada le dijo que simplemente había estado en un cumpleaños de una amiga, la madre le dio un abrazo y le dijo que no lo volviera a hacer entonces ella llorando le dijo que sí.
A los pocos días cuando iba para el trabajo se sentía muy mal, tenia dolor de cabeza y dolor en los huesos, ella le dijo al jefe que si la dejaba salir y entonces se fue para el hospital y de allí la mandaron para urgencias, donde finalmente falleció. Llegaron los tíos para enterrarla pero a nadie se la dejaron ver y dijeron que no le contaran a la madre ya que de pronto le podía causar mucho daño porque se encontraba delicada de salud.
Uno de los hijos que no la quería y poco le importaba la salud de su mamá, dijo que él no le iba a mentir más, pasaron 3 días y la señora no paraba de preguntar por su hija, entonces el hijo le dijo que Valery había muerto, ella al escuchar eso dijo que no quería vivir más ya que se había muerto la única razón por la cual vivía y la única persona que la quería.
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La señora no comía y no se levantaba de la cama, no hacía nada y dos semanas después falleció, hoy en día descansa al lado de su hija.

